Mario Dominguez

Hace un par de semanas fui de viaje a Mineral del Chico, más precisamente al parque ecológico que comprende grandes hectáreas de coníferas y humedad. Durante mi estadía no pare de tomar fotografías cerca de la cabaña donde nos habíamos alojado, principalmente tome fotos del paisaje, y es que mi curiosidad creció al contemplarlo y sentirme de repente en su inmensidad. Sentirme tan pequeño en tal bastedad solo me animo a recorrerlo, descubrí, no muy tarde que el paisaje natural era mas imponente que el paisaje urbano, paso por mi mente una idea acerca de la formación de esos cerros y arboles enormes, principalmente del tiempo que llevaban ahí y como fue la inspiración de paisajistas pintores antes de la fotografía.  Hablar del paisaje podrá pecar de anticuado, de romántico, pero es momento de que observemos nuestro espacio, habitamos en el, y pocas veces nos detenemos a contemplarlo ¿ Es necesario moverte tan lejos para poder redescubrir el paisaje? ¿ Que tanta atención ponemos al pais

Actualmente el ejercicio de ver fotografías,y la manera de acercarnos a las imágenes ha cambiado, ahora puedes entrar a Flickr, Instagram o Facebook y en un par de clicks tener acceso a toda la información visual (fotos, memes, vídeos) e incluso interactuar con ello, haciéndolo parte de nuestra cotidianidad. Podemos debatir sobre tal imagen, sobre tal foto, acercarnos con mirada critica o con morbo, vouyeristas contemporáneos, nuevas maneras de ver. Nuevos enfoques.           Cambian las maneras de ver e interpretar las fotografías, pero a pesar del tiempo nos siguen mostrando que generan un cambio,que una imagen siempre, en cualquier época, nos mueve, nos seduce, nos hace cambiar. En 1972 , Nick Ut quien cubría la  guerra de Vietnam para la agencia estadounidense Associated Press, inmortalizo la imagen de Kim Phuc, una niña vietnamita de 9 años que sufrió quemaduras en su cuerpo debido a lanzamiento de la bomba Napalm, esta imagen dio la vuelta al mundo y mostró los horrores del c

A fricamericanos. El primer vistazo a la exposición nos permite identificar inmediatamente de que va, unos murales coloridos nos dan la bienvenida. Unos pasos adelante nos encontramos con una cronología de la historia de los esclavos africanos traídos a América durante casi 300 años, desde mediados de los 1500 hasta 1888, es increíble pensar que a menos de 130 años la esclavitud aun no era abolida en territorios Latinoamericanos.  Brasil fue el último país en abolir la esclavitud, sin embargo de 1888 a 2018 aun existe segregación racial, en países como México la comunidad afrodescendiente no se ha reconocido, en Argentina trataron de erradicar todo pasado relacionado con la llegada de esclavos a estas tierras.  300 años de esclavitud se reflejan en estas fotos.    La exposición empieza con los afrodescendientes mexicanos, a situados en las costas de guerrero, Oaxaca , región conocida como Costa Chica y de Veracruz conocido como Coyolillo. Aqui dos artistas nos muestran su visión